Hace algún tiempo, el sacerdote español Ignacio Ellacuría me dijo
que le resultaba absurdo éso del Descubrimiento de América.
El opresor es incapaz de descubrir.
Me dijo:
-Es el oprimido el que descubre al opresor.
Él creía que el opresor ni siquiera puede descubrirse a sí mismo.
La verdadera realidad del opresor sólo se puede ver desde el oprimido.
La verdadera realidad del opresor sólo se puede ver desde el oprimido.
Ignacio Ellacuría fue acribillado a balazos, por creer en esa
imperdonable capacidad de revelación y por compartir los riesgos
de la fe en su poder de profecía.
imperdonable capacidad de revelación y por compartir los riesgos
de la fe en su poder de profecía.
¿Lo asesinaron los militares de El Salvador, o lo asesinó un sistema
que no puede tolerar la mirada que lo delata?
que no puede tolerar la mirada que lo delata?
Eduardo Galeano
No hay comentarios.:
Publicar un comentario