23.6.16

El reino del miedo.


Junio 26. Día contra la tortura.

Por trágica ironía, la dictadura militar del Uruguay nació al día siguiente, en 1973, y convirtió al país entero en una gran cámara de torturas.

Los suplicios servían poco o nada para arrancar información, pero eran muy útiles para sembrar el miedo, y el miedo obligó a los uruguayos a vivir callando o mintiendo.

En el exilio, recibí una carta anónima:

Es jodido mentir, y es jodido acostumbrarse a mentir.

Pero peor que mentir es enseñar a mentir.
Yo tengo tres hijos.

Eduardo Galeano

22.6.16

El Infierno.


Allá por el año 960, los misioneros cristianos invadieron Escandinavia,
y amenazaron a los vikingos: si persistían en sus paganas costumbres,
iban a parar al Infierno, donde ardía el fuego eterno.

Los vikingos agradecieron la buena noticia.
Ellos temblaban de frío no de miedo.

Eduardo  Galeano.

Albert Camus.

"Aprendió a ganar sin sentirse Dios
 y a perder sin 
sentirse basura,
 sabidurías difíciles.
  Aprendió
 algunos misterios del alma humana,
 en cuyos laberintos
 supo meterse después,
 en peligroso viaje, 
a lo largo de sus libros."
Eduardo Galeano

21.6.16

El sol.


"La fiesta del sol, el Inti Raymi, en las estepas y las serranías de los Andes.
Al principio de los tiempos, la tierra y el cielo estaban a oscuras.
Sólo noche había.
Cuando la primera mujer y el primer hombre emergieron de las aguas del lago Titicaca, nació el sol.
El sol fue inventado por Viracocha, el dios de dioses, para que el hombre y la mujer pudieran verse."

Eduardo Galeano.
De: " Los hijos de los días"

Fuegos


A la medianoche de hoy, rompen los fuegos.
El gentío se reúne alrededor de las altas hogueras.
Esta noche se limpian las casas y las almas. Se arrojan al fuego los trastos viejos y los deseos viejos, cosas y sentires gastados por el tiempo, para que lo nuevo nazca y encuentre lugar.
Desde el norte del mundo, esta costumbre se difundió por todas partes.
Siempre fue una fiesta pagana.
Siempre, hasta que la iglesia católica decidió que ésta sería la noche de san Juan.
EDUARDO GALEANO.
Fuente : " Los hijos de los días"