30.7.21

" El arte de mandar."


"Un emperador de China, no se sabe su nombre ni su dinastía ni su tiempo,
 llamó una noche a su consejero principal y le confió la angustia que le impedía dormir.
 Le dijo: « -Nadie me teme».
 Como nadie le temía nadie lo respetaba. 
Y como nadie lo respetaba nadie le obedecía. 
El consejero principal meditó un ratito y opinó: « -Falta castigo».
 Y el emperador sorprendido dijo que castigo no faltaba, porque él mandaba a la horca 
a todo el que no se inclinara a su paso.
 Y el consejero principal le advirtió: «-Pero esos, esos son los culpables. Si solo se castiga a los culpables, sólo los culpables sienten miedo»
El emperador chino pensó y pensó... y llegó a la conclusión de que el consejero principal tenía razón. Y le mandó cortar la cabeza.
 La ejecución ocurrió en una gran plaza pública, la plaza celestial, la plaza principal del imperio.
 Y el consejero fue el primero de una larga lista."

EDUARDO  GALEANO.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario